domingo, 29 de abril de 2012

David Ricardo

David Ricardo fue un pensador económico que planteó en su obra más importante ("Principios de Política Económica y Tributación) la teoría del intercambio internacional, basada en las ventajas comparativas y en la teoría de la renta diferencial.


Algunos de sus principios.


  • La renta surge cuando el recurso, en este caso la tierra, comienza a ser limitado.

  • Una vez que la ley de oferta y demanda es aplicable a este recurso, empiezan a diferenciarse las calidades, habiendo tierras más fértiles que otras.

  • Como los rendimientos finales difieren, ya que una tierra más fértil tendrá más producción con igual costo a una tierra menos fértil, el importe dependerá de la diferencia de las calidades, y el precio del producto final, estará fijado por las tierras de menor calidad.

  • La renta diferencial es la diferencia entre el producto obtenido por iguales cantidades de capital y trabajo.

  • A diferencia de Smith, reconoció que la acumulación y la renta conducen, inexorablemente, a la conflictividad social.




Según Ricardo las ventajas comparativas están dadas por la facilidad que una nación tiene para producir tal o cual procuto. Por ejemplo, para Inglaterra, era muy costoso fabricar granos así como también para una colonia inglesa podría ser muy costoso desarrollar la industria.






Fuente: "Economía para principantes".

martes, 3 de abril de 2012

John Maynard Keynes

John Maynard Keynes fue un pensador económico crítico de la economía ortodoxa. En contraposición con los neoclásicos, que definen el comportamiento de los diversos actores económicos desde la microeconomía, Keynes sostuvo que para comprender los fenómenos económicos era necesario pensar globalmente, lo que era decir, pensar a partir de teorías macroeconómicas para entender al consumo, al empleo, a la inversión entre otras cosas.

Algunos de los principios de JM Keynes.
  1. El pleno empleo depende del nivel de inversiones.
  2. El crecimiento de las inversiones tiende a reducir la eficencia del capital.
  3. Cuando la tasa de interés es alta, baja la inversión y aumenta la desocupación.
  4. El desempeño del capitalismo requiere de la intervención del Estado, porque el mercado puede asignar recursos pero no ser el cimiento de una sociedad. 
  5. Los mercados deben ser equilibrados a través de políticas estatales para fomentar el consumo masivo.
  6. La intervención del Estado no busca reemplazar la actividad privada sino darle una racionalidad colectiva a ese esfuerzo individual.
  7. El gasto de la familia depende del ingreso, mientras que la inversión depende de las expectativas que los empresarios tienen sobre las futuras ganancias.
La demanda efectiva
La demanda efectiva es el conjunto de bienes realmente comprados en una economía, por lo que es la suma de los bienes de consumo (artículos comprados por los consumidores) y los bienes de capital (máquinas, materias primas, fábricas).


Propensión marginal al consumo
El consumo es una función del ingreso, la otra es el ahorro. Por lo que el consumo siempre será mayor a 0 y menor a 1.


¿El ahorro es la base de la fortuna?
A diferencia de los clásicos, que pensaban que el ahorro estimulaba la inversión, Keynes, estableció todo lo contrario. Para él las inversiones hacen crecer el ingreso y permiten el ahorro. Por lo que el aumento del ahorro nacional puede hacer caer el ingreso por falta de inversión puesto que disminuye el consumo.


Curva de demanda de inversión
La curva de la demanda estableció una relación entre la inversión y la tasa interés. Cuanto más alta es la tasa, menos se invierte y viceversa. Si la tasa de interés es elevada, lo que es decir que no se podrá tomar créditos y después devolverlos, conviene prestar los ahorros.´


El salario
La teoría de la economía clásica (la visión de la empresa) supone que la baja de los salarios reduce el desempleo, ya que al reducirse el costo laboral que es un costo de producción, se decide un aumento de producción, para lo cual se toma más mano de obra. Como resultado la empresa gana. Sin embargo la demanda global cae, por haber menos poder de compra. Si esto sucede el ingreso nacional disminuye y el nivel de actividad decae.
Ejemplo: A un trabajador cuando le reducen el salario de $100 a $50 y se dirige a comprar pan, en lugar de pedir 1 kilo pide 1/2 kilo. En consecuencia el panadero va a comprar harina y compra 1/2 kilo en lugar de un kilo. Entonces la vendedora de harina compra menos de alfileres el mes que viene porque tiene menos dinero. Así decrece la actividad económica y se imposibilita la creación de nuevos puestos de trabajo.

Tasa de interés
La tasa de interés y la cantidad de finero circulante deben ser influidas por las políticas del Estado para fomentar la demanda global. 


¿Qué conductas genera la inflación?
Al subir los precios algunas personas compran dos paquetes de fideos, porque al siguiente mes no podrá comprar esos productos con el mismo dinero. Otros frente al aumento de precios deciden comprar lo mínimo e indispensable y ahorrar el resto del dinero que le ingresa, por ejemplo, comprando oro.
El primer tipo de inflación es aceptable para Keynes y significa un incentivo para el consumo, mientras que la segunda promueve el ahorro.


Origenes e historia del keynesianismo
a) El fin del libre comercio internacional
El Congreso de los EE UU aprobó en 1930 la Ley Hawley Smoot, la cual elevaba los aranceles de importación para todos los productos que ingresaran a ese país. Para salir de la crisis del '30 el presidente Franklin Roosevelt aplicó un pacto social, el New Deal, que implicó la intervención del Estado en áreas económicas a través de políticas como la Ley de Recuperación de la Industria, el Decreto de Seguridad Social, entre otras medidas de gobierno.
b) El Estado de Bienestar
Una consecuencia práctica de la aplicación de la economía keynesiana fue el surgimiento en Europa de un Estado que garantizaría el pleno empleo, los servicios sociales básicos universales (salud, educación), la previsión social (jubilación) y la extensión del acceso al crédito de franjas de la población que antes no la tenían.
c) El Plan Marshall
Estados Unidos preparó el Programa de Recuperación Económica de Europa en su rol de nuevo líder de Occidente. Abarcó 16 países, más Alemania Occidental. Durante su aplicación (1948-1952) los países europeos crecieron un 20% en promedio. Se promovió la obra pública para garantizar el pleno empleo y reactivar la economía.
El plan resulto ser tan exitoso que su aplicación fue propuesto por el presidente Harry Truman para ser implementado en los países subdesarrollados siempre y cuando se ajustaran a la política anticomunista de Occidente, contenida en la Doctrina Truman.


Crítica al Keynesianismo
a) La curva de Philips ataca a las bases del keynesianismo
La curva demostraba que los esfuerzos del gobierno por mantener alto el empleo no hacían más que aumentar la demanda global. Al elevarse la producción para responder a la demanda, se aumentaba el empleo. Sin embargo, la demanda de trabajo eleva la presión sobre los salrios, lo que a su vez, se traslada a los precios.
Milton Friedman: "Al reducir el desempleo artificiosamente, se produce la inflación. Lo que no pueden entender es que el desempleo es algo natural. Es como los pobres: desde que el mundo es mundo, siempre los hubo y siempre los habrá".










Fuente: "Economía para principantes"

domingo, 1 de abril de 2012

La deuda de Malvinas

Me resulta imposible no pensar la cuestión Malvinas en término de deudas. ¿Cuánto le debemos a los pibes de Malvinas? Le debemos la democracia, disculpas y honor. Los pibes argentinos fueron víctimas que un gobierno dictatorial que no midió consecuencias y no le bastó con desaparecer personas, torturar seres humanos, robar bebés, afanarse los fondos de los donativos para Malvinas, triplicar la deuda externa, destrozar cientos de miles de puestos de trabajo, robarnos el derecho a votar, entre otras maravillas. También generó una guerra. Una guerra sin sentido, como toda guerra, pero que no tuvo como víctimas a dictadores carniceros, sino a los pobres pibes argentinos. Desarmados, congelados, sin comida, sin futuro. Los mandaron a morir, sin piedad.


Se suele decir que ninguna generación pagó tan caro sus sueños como la de la militancia setentista. La de las utopías, la de la resistencia. Bueno, tal vez haya que reformularlo: los pibes de Malvinas también. No se puede negar. ¿En qué medida no les arruinaron la vida? ¿No son equiparables los traumas de la posguerra a los vestigios de los sobrevivientes de las torturas en la ESMA? ¿Cómo negarlo? Pero bueno, para atrás no se vuelve, por lo que no sirve de nada correr tras el viento. Creo, en mi opinión, que la mejor manera de reivindicar la segunda generación de pibes arruinada por el Proceso de Reorganización nacional en siete años, es no olvidarlos.



A ellos, honrando mis deudas,


Mil gracias.